Con la llegada de septiembre a todas las personas nos ocurre algo: nos damos cuenta que no hemos conseguido lograr los propósitos que nos marcamos en enero. ¿Dónde quedó el lunes que ibas a apuntarte al gimnasio? ¿Dónde han quedado todos esos libros que te propusiste leer?
Es por eso que dejar atrás agosto se siente como un balde de agua fría (no muy deseable incluso con este calor) y, por lo general, desmotiva. Hoy quiero intentar darle la vuelta a esta situación para que lo veas de otro modo. Darte cuenta en septiembre de esas metas pendientes, te permite tener cuatro meses para varias cosas:
- Cumplir con algunos planes.
- Adquirir los hábitos que te planteaste y necesitarás.
- Planificar los propósitos del siguiente año (pero en serio).
- No hacer nada (pero no vamos a contemplar esta opción en este artículo).
Como imagino que te decantas por alguna de las tres primeras opciones, te voy a compartir los 5 pasos para lograr tus propósitos antes de año nuevo y terminar 2021 con más motivación y ganas de planificarte.
1. Escribir tus logros y tus metas pendientes
Coge un folio o un cuaderno y haz una lista de todos los logros del año, sin importar si han sido planificados o no. Aunque sean pequeños, anótalos. No te fijes en la cantidad, sino más bien en la calidad. ¿Te enorgulleces de lo que has conseguido? Si la respuesta es no, deberías, pues este año tampoco ha sido fácil.
Ahora escribe aquellas metas pendientes, las que no has cumplido y te han dejado con un sabor de boca agridulce. Hoy vamos a trabajar con estas para ver cuáles podemos rescatar y pasar a la lista de logros.
2. Estimar el tiempo de realización
Lee cada propósito y reflexiona sobre él:
- ¿Qué tareas debes realizar?
- ¿Qué materiales precisas?
- ¿Necesitas más personas o puedes lograrlo en solitario?
Con esta información en mente, trata de estimar el tiempo de realización que va a requerir cada propósito. Aquellos cuyo tiempo sea entre 1 y 3 meses pueden rescatarse, pero no todos y eso lo verás en el siguiente punto.
3. Priorizar las metas asequibles
Existen varios métodos para priorizar. En este caso, puesto que ya casi termina el año y el cansancio se va notando, te recomiendo que ordenes según la motivación y las ganas que tengas de lograr ese propósito. Siempre que no se trate de algo importante y urgente. Al final, el objetivo también es que no decaigas y empieces el año con actitud positiva y proactiva, por lo tanto prioriza tu bienestar.
4. Crear un plan de acción
Ahora que ya tienes un propósito en el que enfocarte, es momento de crear el plan de acción, tu modus operandi. Puedes descomponer esa meta en metas mensuales o simplemente más pequeñas. De ese modo, puedes realizar una lista de tareas que debes cumplir cada mes. Al fin y al cabo, aterrizar un propósito es fundamental, es ir de lo general a lo específico para poder concretar acciones diarias.
5. Ser constante y tener disciplina
Para finalizar, y puede que sea el paso más importante, es que seas constante y cumplas con el plan de acción que has creado en el punto anterior. Puedes modificarlo, pero tenlo presente a diario para que no se te pase por alto (¡otra vez!).
Espero que estos consejos te hayan servido y que consigas lograr tus propósitos pendientes.